Aceleradoras: ¿cómo pueden ayudar al agronegocio a despegar?

El tema de este post puede resultar desconocido o incluso curioso para gente como nosotros que se desempeña en el mercado agropecuario, ya que una aceleradora por ahora no es algo habitual en nuestra vida diaria. Pero indirectamente, las aceleradoras están más presentes a nuestro alrededor que lo que imaginamos. WhatsApp, Airbnb y Uber son algunos nombres de empresas mundiales que han tenido sus historias de éxito potenciadas por una aceleradora de negocios. En Brasil, incluso siendo más recientes y menos expresivas, estas estructuras ya suman casos exitosos.

Pero al fin y al cabo, ¿qué son las aceleradoras?

Para explicarlo fácilmente vamos a plantear una analogía mediante un ejemplo práctico y común de nuestro día a día: imagínese que quiere adelgazar 5 kg. La “fórmula” para perder peso se conoce bien, ¿verdad? Basta tener una nutrición adecuada y practicar ejercicios físicos regulares. Pero para perder peso más rápidamente y con calidad, sabemos que el apoyo de profesionales, como nutricionistas y entrenadores personales ayuda en gran medida a agilizar el proceso. Ellos aportan métodos, planes y rutinas más apropiados para que se logre alcanzar el peso ideal y, por consiguiente, el objetivo más rápidamente y de manera más saludable. Una aceleradora de negocios es lo mismo. A través de mentores, redes de contactos, información privilegiada, experiencia de negocios a mayor escala y acceso a las inversiones, las aceleradoras consiguen crear caminos más cortos y afirmativos para dar un gran salto de crecimiento.

El modelo de aceleradora de startups ya es una realidad en Brasil en los mercados vinculados a la tecnología, principalmente en modelos de negocios relacionados a internet y telefonía móvil. En el agronegocio no es una práctica común, ya que se trata de un sector productivo que necesita una gran estructura y que ya cuenta con modelos de negocios bien establecidos, a diferencia de los proyectos de tecnología que pueden nacer pequeños y son muy variables.
Esta realidad, sin embargo, está empezando a cambiar. Con costos de producción cada vez más elevados, un menor número de personas interesadas y capacitadas para trabajar en el campo, y con mercados cada vez más exigentes y conectados que definen diariamente los tipos de productos que se desean consumir, así como sus procesos de producción (menos impacto, más salud, más estandarización, trazabilidad, etc.), las compañías y los productores están siendo presionados a innovar. Y es en este proceso de innovación que hay espacio para acciones que potencien las iniciativas de aceleración.

Un ejemplo de esto es la Aceleradora Agriness, un proyecto innovador creado por la empresa para impulsar la productividad de las granjas de cerdos. La empresa es actualmente líder de mercado en el sector de tecnología y gestión para la porcicultura y, tomando como base la metodología de PENSAMENTO+1 desarrollada por Agriness, ha creado un programa de aceleración de la productividad que apunta a apoyar al productor de cerdos y a su equipo de personal para hacer la gestión de la producción con más eficiencia, menos desperdicio y más ganancia.

En el caso de la porcicultura y del agronegocio en general, el concepto de aceleración es el mismo de las startups, pero el punto de mira deja de estar en las ventas y las estrategias de expansión de mercado para dirigirse a las personas, los procesos, la información y, principalmente, la actitud gerencial para lograr la máxima eficiencia productiva. Ejemplos como los del porcicultor Ricardo Coldebella, que participó de un programa de aceleración realizado por la Aceleradora Agriness dentro de la cooperativa Copérdia, comprueba que un apoyo estructurado acelera efectivamente el crecimiento de los negocios. En dos años del programa de aceleración, el productor tuvo una ganancia de productividad de 4 Destetados/Hembra/Año y un incremento efectivo del 18% en el resultado final de su producción.

“Vi los resultados del programa en la práctica, a través del aumento de los lechones que se venden cada año. Mejoramos gracias a esta metodología que nos permitió identificar dónde estaban las verdaderas oportunidades.” Ricardo Coldebella

“Estamos felices de poder aportar al sector y promover la mejora de los resultados y de la realidad del productor rural. Estamos seguros de que el brasileño tiene capacidad de producir más calidad, pero necesita orientación, asesoramiento, seguimiento y métodos que indiquen este camino “, comenta Everton Gubert, CEO de Agriness y coordinador de la Aceleradora creada por la empresa.

Otras iniciativas relacionadas al fomento de la innovación centradas en el agronegocio se han extendido por todo Brasil y, con seguridad abrirán espacios para modelos como el que Agriness promueve. Una aceleradora puede, sin lugar a dudas, ayudar al agronegocio a despegar apuntando a la eliminación del desperdicio y al aumento de la eficiencia de la gestión. Su papel en esta historia es pisar a fondo y mejorar la eficiencia de la producción aumentando su rentabilidad.

¿Ya conocía el término “aceleradora”? ¿Ya había asociado o visto un modelo de aceleración aplicado a la porcicultura?